En nuestros tiempos acelerados, muchas personas buscan formas de aportar más estabilidad, claridad y energía a su vida diaria. Una herramienta probada y a menudo subestimada para ello son los rituales. No siempre tienen que tener un trasfondo espiritual: se trata más bien de acciones conscientes que equilibran cuerpo y mente. Los rituales son pequeños
